Zona Arqueológica Tepeapulco
Cruz del año y arte rupestre al pie del cerro eterno
A unos 15 km de Tecozautla, en Hidalgo, se encuentra la zona arqueológica de Tepeapulco, también conocida como Xihuingo, situada a los pies del cerro homónimo de 3 240 msnm. Habitada entre el siglo I a.C. y el 750 d.C., se relaciona con la cultura teotihuacana y funcionó como centro ceremonial y zona comercial clave entre el Altiplano y el Golfo.
La “Pirámide del Tecolote” marca el corazón del sitio: una estructura rectangular de estilo teotihuacano que delimita una gran plaza y una avenida central similar a la Calzada de los Muertos. En los acantilados cercanos se ubican más de mil petrograbados, además de pinturas rupestres en rojo en dos peñas conocidas como El Tecolote (con figuras armadas) y Las Tres Peñas (huellas y símbolos geométricos)
Pasear por Xihuingo es caminar entre bosque bajo, sobre terrazas de tezontle rojo y murales minúsculos que narran símbolos antiguos. El espacio arqueológico es interrumpido por un sendero que lleva a un museo e iglesia colonial donde fray Bernardino de Sahagún elaboró parte de su obra monumental entre 1558 y 1560, lo que enseña cómo la historia prehispánica y colonial convergen en el mismo lugar
Visitar Xihuingo es sentir la cruza del año en el horizonte, contabilizada entre cruces punteadas en las rocas; es leer formas trazadas en piedra y sentir el eco de quienes calcularon el tiempo con precisión milenaria. Aquí, la astronomía y la escultura rupestre se funden en un paisaje sagrado que aún marca el calendario humano y el pulso natural del valle.