Heroica Ciudad de Huajuapan de León, Oaxaca
En el corazón de la Mixteca oaxaqueña se encuentra la Heroica Ciudad de Huajuapan de León, un destino que combina historia, cultura y tradición. Rodeada de paisajes montañosos y reconocida por su espíritu valiente, esta ciudad invita a recorrer sus calles coloniales, disfrutar su gastronomía típica y vivir de cerca la calidez de su gente.
Enclavada entre montañas y cielos que parecen pintados a mano, la Heroica Ciudad de Huajuapan de León es un destino que cautiva por su historia, su gente y su sabor. Conocida como la “Cuna del Jarabe Mixteco”, esta ciudad combina el encanto de lo tradicional con la calidez de un pueblo que recibe a todos con los brazos abiertos. Su nombre significa "lugar de huajes junto al río", o "tierra de huajes". Antiguamente se llamaba Ñuudee, en mixteco "tierra de valientes" o "lugar de gente valiente". Hoy Heroica Ciudad de Huajuapan de León, se distingue por su magnífico patrimonio cultural, especialmente por sus espléndidas edificaciones de estilo neoclásico.
Así mismo, su gran riqueza cultural se refleja a través del baile conocido como "Jarabe Mixteco", el baile más emblemático de la región, un símbolo de identidad y orgullo para los huajuapeños; y la nostálgica "Canción mixteca", famosa en todo el país y de la autoría del huajuapeño José López Alavés, nacida del sentimiento de nostalgia de su autor, esta melodía expresa el profundo amor por la tierra natal y el dolor de estar lejos de ella. Su letra conmueve por su sencillez y su profunda emoción, por eso, es considerada un himno de los oaxaqueños ausentes, evocando la añoranza por los paisajes, las costumbres y la calidez de la Mixteca.
La gastronomía de esta emblemática tierra se reflaja en platillos como el famoso mole de caderas, el chileajo, el mole de fiesta, el chilate y el huchimole, que se encuentran todo el año en los restaurantes y mercados de la ciudad, y se unen en la fiesta de los 4 moles en el mes de abril. En cuanto al mole de caderas, un platillo muy especial, debido a que el chivo con el que se prepara es criado en los montes de la región y alimentado tan solo a base de hierbas silvestres, lo cual le da un sabor tan especial a su carne.
En Huajuapan de León, también puedes disfrutar de experiencias imperdibles, como visitar la Zona Arqueológica Cerro de las Minas, perteneciente a la cultura mixteca, esta zona inició su primera fase constructiva en el año 400 a.C., lo que implica que su origen data del periodo preclásico. El Cerro de las minas fue contemporáneo de Monte Albán (500 a.C. a 850 d.C.), tiene una extensión aproximada de 50 hectáreas y cuenta con estructuras piramidales de ocho metros de altura y cuarenta de diámetro. Descubre la Catedral de San Juan Bautista, en este templo neoclásico dedicado a la Virgen de Guadalupe yacen los restos mortales del general Antonio de León y Loyola, héroe que falleció el 8 de septiembre de 1847, en la batalla del Molino del Rey en contra de la invasión norteamericana. Así mismo, puedes conocer la arquitectura vernácula del Parque Independencia, este bello lugar, con su quiosco, es una muestra de la arquitectura vernácula. Su construcción se inició en el año de 1890, y el quiosco, que lleva el nombre de Carmen Romero, esposa de Porfirio Diaz, fue inaugurado el 2 de abril de 1902. Al norte del parque se encuentra el monumento al general Antonio de León, construido entre los años de 1900 y 1901, en homenaje al héroe más importante de la Heroica Ciudad de Huajuapan de León.
El Palacio Municipal de Huajuapan resalta la historia y cultura de los huajuapeños, sus murales, en los cuales el pintor José Luis García, plasmó las diferentes épocas y acontecimientos de la ciudad, resaltando las tradiciones, costumbres y la memoria de las diferentes personalidades que han forjado la Heroica Ciudad de Huajuapan de León. Aventúrate recorrer sus calles llenas de historia y encanto. Su arquitectura colonial, templos y plazas que reflejan el legado mixteco que la distingue. Visitar esta heroica ciudad es viajar al pasado entre muros de cantera, tradiciones vivas y un espíritu que mantiene su grandeza a lo largo del tiempo.