Zona Paleontológica Rincón Colorado
Donde el tiempo se mide en huellas
A unos 43 km al sureste de Saltillo, se abre paso hacia un desierto que guarda ecos de un pasado remoto: Rincón Colorado, la primera zona paleontológica de México abierta al público, un santuario natural donde los dinosaurios dejaron su reliquia en piedra. Este sitio, con aproximadamente 72 millones de años de antigüedad, revela un pasado en el que este territorio fue playa del mar interior de América del Norte, ahora transformado en desierto
El recorrido de casi 1.7 km se hace entre dos senderos temáticos: el de las “Ventanas Paleontológicas”, donde encontrarás más de 120 réplicas de huesos originales, incluyendo el emblemático Velafrons coahuilensis, un hadrosaurio con una frente en forma de vela que solo vivió aquí; y el del “Tiempo Geológico”, que invita a caminar a través de etapas de evolución, desde los inicios de la Tierra hasta la aparición del maíz
La experiencia también incluye áreas lúdicas donde visitantes de todas las edades pueden tocar reproducciones de cráneos, huellas y hasta formar rompecabezas de cola. Este enfoque didáctico rompe con los moldes clásicos de museos, pues aquí la naturaleza es protagonista
Ha sido reconocido por organizaciones internacionales como la única zona paleontológica en México y uno de los mejores sitios geológicos de Iberoamérica
Visitar Rincón Colorado es hacer una peregrinación hacia lo milenario: cada ventana, cada huella de hadrosaurio y cada fósil marino es testigo de un tiempo en el cual este valle era un mundo diferente. Aquí, la piedra no está muda: cuenta cómo el mar dejó de existir, cómo la vegetación tropical cedió paso al desierto y cómo la vida cambió su rostro. Es una invitación a caminar sobre 72 millones de años de historia, sin prisa, en armonía con la vida, el viento y el fuego ancestral del desierto.