Actividades imperdibles en este destino de Guerrero.
Entre aguas cálidas del Pacífico y calles que conservan el alma de un pueblo pesquero, Zihuatanejo invita a vivir experiencias que mezclan naturaleza, historia y encanto local. Aquí, cada día comienza con el rumor de las olas y termina con atardeceres que parecen pintados a mano. Si buscas descubrir su esencia, hay tres actividades que no pueden faltar en tu viaje.
1. Avistamiento de ballenas. Entre diciembre y marzo, el mar de Zihuatanejo se convierte en escenario de un espectáculo natural único: las ballenas jorobadas emergen con saltos majestuosos y cantos que estremecen. Una travesía en lancha te acerca a estos gigantes del océano, en un encuentro que roba el aliento. 2. Visitar el Partenón. En lo alto de la ciudad, esta construcción misteriosa y envuelta en leyendas ofrece vistas panorámicas incomparables de la bahía. Su arquitectura monumental y su historia intrigante lo convierten en un lugar que combina arte, poder y misterio. 3. Recorrer el Paseo del Pescador. Un encantador camino junto al mar que une el muelle con la playa Principal. Entre puestos de artesanías, restaurantes y el aroma de pescado fresco, es el lugar perfecto para sentir la esencia local y disfrutar un atardecer que pinta el cielo de oro y púrpura.
Además de ser un excelente destino de sol y playa, es un pueblo con raíces prehispánicas que perduran hasta nuestros días, por lo que representa una vista al pasado histórico de México.
Un impresionante centro cultural con vistas a la bahía de Zihuatenejo.
Hermoso camino que se abre entre las rocas y el mar para brindar a las y los transeúntes paisajes maravillosos entre palmeras, murales, adoquines y esculturas desde el muelle de Zihuatanejo hasta los límites de Playa La Madera.
Disfruta de lo mejor del turismo de naturaleza y aventura en la Costa Grande de Guerrero