El Pueblo Mágico de Chignahuapan recibió su nombramiento el 25 de septiembre de 2015. Durante la era prehispánica, fue habitado por totonacas, quienes convivieron con nahuas, otomíes y tepehuas a partir del siglo X.
Entre sus atractivos naturales destacan la Laguna de Chignahuapan, las Cascadas de Quetzlapan y las aguas termales.
En lo cultural, sobresale la Basílica Menor de la Inmaculada Concepción y el mural "Descenso de Quetzalcóatl". Su gastronomía incluye platillos como barbacoa de hoyo, tlacoyos, pollo en hongo, chicharrón prensado y escamoles.
Las artesanías que se producen en la región son esferas de vidrio soplado, alfarería, textiles de lana, productos de madera y dulces típicos.
Entre las festividades más importantes se encuentran la Fiesta del Santo Patrono (25 de julio), el Festival de Luz y Vida (Día de Muertos) y el Festival de la Barbacoa y el Pulque.