Zona Arqueológica de Bonampak

Adéntrate en el corazón de la exuberante selva lacandona de Chiapas y descubre Bonampak, una joya del mundo maya que ha cautivado al mundo con sus impactantes pinturas murales. Su nombre, que en lengua maya significa “muros pintados”, cobra pleno sentido al encontrarte frente al Templo de los murales, donde cada pared narra con intensidad escenas de batallas, rituales y celebraciones que ocurrieron hace más de mil años.

Situada en el majestuoso valle del río Lacanhá, esta zona arqueológica abarca más de cuatro kilómetros cuadrados, aunque actualmente sólo es posible recorrer su parte más emblemática: La Gran Plaza, con su imponente Acrópolis, estelas talladas y el famoso Edificio 1. Aquí, en un entorno rodeado de naturaleza virgen, el tiempo parece detenerse.

Aquí se encuentra la estela 1, erigida por orden del gobernante Chaan Muwan II durante el apogeo del sitio, para celebrar su quinto año de gobierno. S e alza con casi 6 metros de altura (aproximadamente 20 pies), convirtiéndose en una de las estelas más altas del mundo maya.

A pesar de romperse en varios fragmentos al caer, fue rehabilitada con éxito. Parte de su tocado quedó erosionado por la lluvia .

Bonampak no destaca por su arquitectura monumental como otras ciudades mayas, pero guarda un tesoro aún más valioso: murales únicos en todo Mesoamérica por su colorido, detalle y excelente estado de conservación. En ellos se relata la victoria del gobernante Chan Muwan II, en alianza con la ciudad de Yaxchilán, sobre los antiguos gobernantes locales.

Además de los murales, podrás admirar finos dinteles de piedra y esculturas con inscripciones que revelan episodios clave de su historia. Estas piezas lo convierten en un sitio de gran importancia histórica y epigráfica.

Reconocido como Monumento Nacional desde 1992, Bonampak es mucho más que una zona arqueológica: es un viaje al pasado, una conexión con el alma del mundo maya y una experiencia que todo amante de la historia y la aventura debe vivir.