Embárcate en un viaje al corazón verde de la Sierra Gorda de Querétaro y déjate cautivar por la Misión de Santa María del Agua de Landa, una joya del barroco indígena que espera entre montañas y nubes. Declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO en 2003, esta misión es la última en construirse en la región, pero no por ello menos asombrosa.
Su fachada, ricamente ornamentada, es un tapiz de símbolos religiosos y figuras indígenas talladas con maestría. Sirenas con rasgos nativos, ángeles y motivos florales dialogan en piedra, revelando la fusión única entre la fe europea y el alma ancestral de los pueblos originarios.
Visitar la misión es viajar en el tiempo, respirar espiritualidad y admirar un equilibrio arquitectónico que asombra por su belleza y profundidad simbólica. Si buscas una experiencia que combine historia, arte y naturaleza, Santa María de Landa te espera con los brazos abiertos y el eco de siglos en sus muros.