El Tigre
Los impresionantes restos de una capital maya situada exactamente entre los reinos del sur de Guatemala y los de la costa del Golfo al norte, hay pocos dominios selváticos más atractivos para explorar.
La zona arqueológica de El Tigre, conocida a veces como Itzamkanac, se encuentra a una hora en coche al este de Candelaria, en el sur del estado de Campeche. El yacimiento fue un importante centro ceremonial y político maya durante el periodo Clásico Tardío (600-900 d. C.) y siguió siendo relevante hasta la llegada de los españoles en el siglo XVI. Se cree que El Tigre fue la antigua capital del dominio de Acalán. Constituía un enclave estratégico debido a su proximidad al río Candelaria, muy utilizado para el comercio y la comunicación con otras regiones del mundo maya.
El complejo arqueológico consta de varias estructuras monumentales, entre las que se incluyen tres grandes pirámides construidas alrededor de una plaza central. La más impresionante es la que hoy se conoce como Edificio 1, con una base piramidal de más de 20 metros de altura. Desde lo alto se puede disfrutar de una vista panorámica de toda la zona. También hay altares, estelas y plataformas en la selva circundante, aunque no todos han sido excavados. Todos ellos proporcionan amplias pruebas de la compleja importancia social, religiosa y política del yacimiento.
El Tigre es uno de los mejores ejemplos de la transición entre los periodos Clásico y Posclásico. También proporciona pruebas de la interacción entre los mayas de Petén, en Guatemala, y los de las zonas costeras del golfo, al norte. Las investigaciones han revelado enterramientos, cerámica policromada y elementos arquitectónicos que ayudan a comprender la vida cotidiana y las prácticas rituales de los habitantes en la antigüedad.
La zona está abierta al público, aunque no es muy visitada. Situada en medio de la selva y cerca del sinuoso y ondulado río Candelaria, su visita suele ser uno de los puntos destacados de esta parte de la ruta del Tren Maya. Un sitio aún menos visitado, con el sugerente nombre de Cerro de los Muertos, se encuentra un poco más al este, a lo largo del afluente que se une al río Candelaria en El Tigre. La mayoría de los visitantes llegan a través de Candelaria, y los grupos turísticos pueden hacer el viaje a la selva y a lo largo del río mucho más fácil.