Castillo de Teayo

En la zona norte de Veracruz, dentro de la región Huasteca, se encuentra Castillo de Teayo, un sitio arqueológico fascinante y uno de los más representativos del México antiguo.

Su nombre proviene del vocablo huasteco teayo, que significa “en la tortuga de piedra”, evocando la forma y simbolismo de su estructura principal.

El sitio arqueológico se erige en el centro de la población del mismo nombre y destaca por su imponente pirámide de 11.3 metros de altura, compuesta por tres cuerpos escalonados que culminan en una plataforma superior donde se edificó un templo ceremonial.

Este monumento combina influencias mexicas, huastecas, toltecas y mayas, lo que lo convierte en un ejemplo único de fusión cultural mesoamericana.

Su ocupación se remonta al Posclásico Tardío, aunque también conserva vestigios de periodos anteriores.

Durante el dominio de la Triple Alianza, Tetzapotitlan —nombre original del sitio— tuvo un papel destacado como centro económico y religioso, lo que impulsó la producción de más de 60 esculturas identificadas con deidades e imaginería mexica.

El recorrido por Castillo de Teayo es una experiencia inmersiva.

Desde el zócalo municipal y la calle Porfirio Díaz puedes observar distintas perspectivas del monumento, que se integra de forma armónica con el entorno urbano.

A un costado, el Museo de Sitio Castillo de Teayo exhibe piezas arqueológicas halladas en la zona: figuras humanas y animales, representaciones de dioses y objetos ceremoniales que permiten comprender la vida y cosmovisión de los antiguos pueblos que habitaron esta región.

Además del valor histórico, el lugar te ofrece la oportunidad de disfrutar del ambiente cálido y hospitalario de su gente.

Pequeñas bancas y miradores te permiten contemplar la pirámide al atardecer, cuando la piedra adquiere tonalidades doradas que parecen revivir su esplendor ancestral.

En tu próxima visita te proponemos la siguiente ruta: desde Poza Rica, toma la carretera estatal Poza Rica–Tihuatlán y sigue hacia el noroeste. Desde Tihuatlán, continúa por la carretera Tihuatlán–Castillo de Teayo (aproximadamente 35 km, 40 minutos de trayecto). El camino se encuentra en buen estado y rodeado de paisajes característicos de la Huasteca veracruzana.

Si vienes desde Córdoba u Orizaba, el trayecto estimado es poco más de 4 horas, tomando la autopista Veracruz–Poza Rica hasta llegar a Tihuatlán. Desde allí, sigue la desviación hacia Castillo de Teayo, perfectamente señalizada y de fácil acceso.