Teotihuacán es uno de los lugares más visitados de todo México. Es tan especial que está flanqueado en dos de sus lados por Pueblos Mágicos, con un tercero, Otumba, un poco más lejos. Las antiguas ruinas reciben cada día decenas de autobuses turísticos con cientos de visitantes. Algunos de estos visitantes se aventuran a salir de la antigua ciudad para dirigirse a San Juan Teotihuacán (al suroeste de las ruinas) o a San Martín de las Pirámides (al noreste de la ciudad). Ambos lugares merecen una visita por sí mismos.

La constelación de estos sitios presenta un entorno acogedor. La antigua ciudad fue una vez el poder dominante en Mesoamérica. Su influencia se dejó sentir por todo Yucatán y hasta bien entrada América Central. Hoy en día, la gente la visita sólo para pasear a la sombra de sus grandes pirámides y de la extensa ciudad que aún se mantiene en pie.

Pero no se pierda el centro de San Juan Teotihuacán. Las comidas son mucho más accesibles y asequibles aquí o en San Martín de las Pirámides. Los visitantes también se hacen una mejor idea de lo que ha sobrevivido de la antigua civilización. Y a menudo es más de lo que se piensa. Ambas ciudades ofrecen un calendario regular de eventos y conmemoraciones y la mayoría de ellos coincidirán con las actividades diarias ya programadas para las zonas del mercado central y la plaza de la ciudad.

Llegar a Teotihuacán nunca ha sido tan fácil. Los autobuses turísticos llegan desde todo el país. Pero desde Ciudad de México, la mayoría de los visitantes llegan a la Central de Autobuses del Norte o a la zona del Zócalo.

Se recomienda llevar protector solar y sombrero, así como calzado cómodo para caminar.
Llegue lo antes posible, ya que es probable que haya mucha gente por la tarde.
Los billetes de la estación de autobuses Autobuses del Norte son los más asequibles.
Las líneas de autobús más comunes a Teotihuacán son las que se encuentran alrededor de la "Puerta 8", en el extremo norte del edificio de la terminal.
Muchos autobuses paran en el pueblo de San Juan Teotihuacán antes del sitio principal y en San Martín de las Pirámides inmediatamente después.

No hay que subestimar la importancia de estos lugares para el país y, de hecho, para comprender nuestro lugar en el universo. Extender la visita a las comunidades circundantes profundiza esa comprensión. También es esencial para mantener unos viajes sostenibles y responsables.